Este escrito se basa en opiniones personales y años de estudio.
Con el tiempo, las personas se han preguntado por qué surgen las enfermedades, lo que ha llevado a innumerables investigaciones sobre el tema. Muchos comparten esta inquietud, ya que la mayoría busca sentirse bien, mantener su vitalidad y evitar el dolor.
Pero aquí la cuestión; desde mi experiencia, la raíz de las enfermedades puede tener varias vertientes. Sí, llevamos una carga genética que nos predispone a ciertas enfermedades, por eso en las consultas médicas se pregunta el historial médico del paciente. Entiéndase que el cuerpo humano es como una maquina inteligente llena de información y que para sobrevivir y continuar evolucionando, la información se pasa de persona a persona. De esta misma forma se pasan ciertos instintos primitivos de supervivencia, como también se puede pasar otro tipo de información, que se puede considerar una información no tan placentera. Como por ejemplo la información generacional y con ella los traumas y enfermedades que sufrieron nuestros antepasados.
En lo personal me enfoco en la sanación desde la raíz, tomando en consideración el inicio de la vida, el medio ambiente, la alimentación, la información que consumes día a día a través de los medios de comunicación, redes sociales, películas entre otros, la salud física, la salud mental/emocional, salud espiritual y por último la información pasada en los genes a través de los ancestros familiares. Ya que todos esos factores pueden influenciar la salud actual del individuo.
Si todo lo antes mencionado puede influenciar la salud de la persona, ¿cómo entonces uno sana todo eso? a lo que contesto, que cada persona se debe trabajar de manera holística e individual, ya que las historias del individuo definen su predisposición de crear o experimenta una enfermedad. Combinar varias técnicas terapéuticas pueden ser beneficiosas para la persona, ya que la sanación es un camino con distintas rutas, por lo que combinar terapias puede ser clave y beneficioso para la persona.
Afortunadamente, estamos en otros tiempos, hay personas que son intuitivas al respecto, pero existen investigaciones científicas que demuestran y confirman lo antes mencionado. Como por ejemplo la epigenética que confirma como el medio ambiente puede influenciar las células en el cuerpo o activar genes que pueden desencadenar ciertas enfermedades. La epigenética es como tener un pistola, que si nadie la dispara, jamás se disparará sola.
Lamentablemente habrá personas que no podrán escaparse de ciertas enfermedades, porque se detectan demasiado tarde o porque provienen de lugares profundos que pueden ser desconocida su procedencia. Por lo que la prevención puede convertirse en el pilar principal de cada hogar. Modificar los hábitos diarios como por ejemplo añadir ejercicios, disminuir los alimentos procesados, cultivar tu propia comida, interactuar con la comunidad, orar o meditar, son algunas de las muchas cosas que se pueden realizar para minimizar la manifestación de cualquier enfermedad. En la medicina se cree que las enfermedades provienen de la falta de homeóstasis en el cuerpo, lo que quiere decir la falta de balance en el organismo.
Otros factores que pueden provocar enfermedades son, el desbalance en la microbiota del cuerpo, problemas genéticos, traumas físico o emocionales. El Dr. Gabor Mate, menciona esto en sus libros y entrevistas, sobre como situaciones emocionales traumáticas producen enfermedades e inflamaciones en distintas partes del del cuerpo. Adicional, el estrés que es una de las cosas que mas afecta al ser humano en la actualidad y, por último, los traumas generacionales que no fueron sanados por aquellos ancestros y que se almacenaron en la memoria celular del cuerpo. Claro esto puede sentirse como una culpa ajena, pero para el beneficio de los ancestros ellos desconocian esa realidad.
Para sentirse bien es necesario realizar cambios de estilo de vida, ya sea a nivel físico o a nivel mental. Hoy día existen muchas cosas que pueden ser realizadas para sentirse bien. Sanar es una decisión a la hora de la verdad, hay quienes elegirán el camino a su sanación y otros que preferirán no hacerlo y eso está bien. Cada persona es dueña de su cuerpo y por ende tiene la potestad de realizar lo que le parezca con el mismo. Eso sí, querer sanar es de valientes porque no siempre es color de rosa. Las personas que decidan lanzarse a sanar su cuerpo, mente y espíritu deben comprender que tiene distintas vertientes y que no existe una píldora mágica que ayude de la noche en la mañana. Sanar es un proceso, cuando va pasando el tiempo y haces los cambios que debes hacer, irás sintiéndote diferente, con más energía, seguridad, alegría, tranquilidad, liviandad y paz. Definitivamente es un camino hermoso que vale la pena recorrer.
¿Sientes en tu corazón un llamado a mejorar tu salud y mejorar como persona? pues este camino es para ti. Poder apoyarte en este proceso es parte de mi visión de vida, ayudar a las personas que se topan en mi camino y que puedan alcanzar lo que personalmente consideran sanación e incluso alcanzar sus metas. Brindar una mano amiga en cada uno de los procesos personales y que sientas compañía, desde un espacio seguro, lleno de amor y con visión compasivo. Poder incluso trabajar en colaboración de la red de apoyo que se tenga y profesionales de la salud para que alcances ese bienestar que tanto anhelas, a veces solo necesitas el empujón para que lo logres y no hay problema con eso. El camino de la sanación puede tomar tiempo y para eso estamos. Por último, sanando, sanamos todos, por eso siento ese llamado a colaborar, porque aunque estamos de pasada en esta vida, irnos mejor de como llegamos y dejarles un mejor porvenir a las proximas generaciones nos toca a todos.
Si llegaste hasta aquí, es porque ya estás en el camino correcto.
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